La tromba marina es un meteoro relativamente habitual en muchas latitudes y países, incluido España.

Esta semana se ha hecho muy popular una tromba marina avistada en Penang, Malasia, que destacó por su enorme diámetro, fuera de lo común. Aunque lo cierto es que otra avistada ayer en Arguineguín, Gran Canaria, tiene poco que envidiarle…

La evolución de la primera, que fue captada en modo timelapse por algunos observadores de la zona, es una auténtica joya para deleite de los aficionados a la meteorología.

Un embudo enorme

Los vídeos y fotos hablan por sí solos. Imágenes impactantes que nos hablan de un embudo enorme, bastante mayor de lo que suele ser habitual.

Pero si echamos la vista a España, nos encontramos con otra pieza bastante interesante también. Poco tiene que envidiarle.

Y es que este 3 de abril de 2019 otra tromba marina con un diámetro llamativo, fue avistada en la localidad grancanaria de Arguineguín.

¿Qué es una tromba marina?

La tromba marina (waterspout en inglés) se trata de un remolino de aire rotando violentamente sobre una gran superficie de agua (mar, lago o un gran río) y que se forma entre la base de una nube de tormenta y la superficie terrestre.

A menudo (no siempre) es visible como un embudo, el cual se forma porque el aire que rota dentro de la tromba se enfría por expansión produciendo la condensación del vapor de agua.

Trombas marinas vs tornados

Aunque un tornado y una tromba marina tienen una estructura similar, el proceso de formación y las consecuencias son diferentes en ambos casos. A pesar de la gran fuente de humedad y la poca fricción con las que se desarrollan, las trombas son menos definidas y considerablemente menos destructivas que los tornados.

Normalmente, la tromba varía en altitud desde 50 m hasta 2 km y presentan un ciclo de vida relativamente corto, de 2 a 20 minutos, aunque la mayoría dura menos de 10 minutos.

En cambio los tornados pueden rebasar con creces estas cifras.

En longitud, las trombas marinas alcanzan desde los 10 a 100 m mientras que un tornado tiene un tamaño de 100 a 300 m.

Si una tromba marina puede desarrollar vientos de 70 a 300 km/h, un tornado es capaz de albergar vientos de 140 a 500 km/h con velocidades de desplazamiento de 20 a 30 km/h.

Otra característica de la tromba marina es que normalmente se disipa cuando la precipitación comienza a caer de la nube, momento puesto que el aire frío advectado por la lluvia corta el combustible que mantiene viva a la tromba marina: el aire húmedo y caliente que llega del agua.

La mayoría de las veces, cuando tocan tierra se disipan y en pocas ocasiones las trombas marinas evolucionan a tornado.

Es estima que aproximadamente un 30% de las trombas vienen acompañadas por tormentas.